Pires clásicos de una mente casi brillante

¡¡¡¡Cómo me divertí y aprendí con estos muchachos!!!!

A eso de las 18:45 de la tarde del viernes, estaba en mi casita, y dije: Voy a esperar para ir a la reunión, porque como no conozco a nadie (salvo a uno), si llego elegantemente tarde, voy a ver a un montón de gente fumando pipa, sin posibilidad de errar de grupo de gente.

Salí de mi casa a eso de las 19:15, y llegué a eso de las 19:30. Y me encontré no solo con la persona que conocía (el Alvarito), y con más gente. Después fue cayendo más gente, y charlamos sobre todo tipo de cosas desde Harry Potter y el Batllefield, hasta pipas hechas acá (y ahí también me enteré que la segunda madera más usada es el olivo para hacer pipas).

Ya me asignaron el cargo de bibliotecaria (¿¿??), función que desempeñaré lo más loablemente posible. Me maté de risa con las anécdotas de Herman, y el cómo las cuenta. Además unos cuantos resultaron ser vecinos del barrio.

A todo esto, yo no pasaba frío por haberme escogido una posición estratégica abajo del aire acondicionado. Y el whisky ayudaba tremendamente. Además lloviznó y todo, y me enteré cuando me fui (que estrené calle, porque me caí en la mitad de Soriano, pero ta, no me hice nada, un raspón nomás).

Y después vino la cata del tabaco Argento Negro. Cuestión con la que aprendí muchísimo por ser el segundo tabaco de pipa que había fumado en mi vida (gracias John), y ahí me enseñaron qué es exactamente cada cosa, las diferencias entre una y otra cosa (tipo de tabaco, corte del tabaco, sabor del humo, hora del día en que se fuma, etc.), y hasta cómo curar la pipa (segundo método que me enseñaron). De todo esto saqué apuntes, hasta el día en que me lo sepa me van a servir de bastón pipense.

Muy buenas las anécdotas, las personas, muy linda calidez humana.

Lo cuento porque fue una experiencia de lo más amena, conocí gente nueva, y si los estudios me lo permiten, intentaré repetirla. Un abrazo a los muchachos de la barra del CPU!!